miércoles, 23 de febrero de 2011

SAGA GUARDIANES DEL TIEMPO

Pero ni siquiera la magia más poderosa y buena que haya existido jamás puede sanar algunas heridas que han quedado abiertas, cicatrices ardientes que queman a cada instante, destrozando lentamente a aquellos que las reciben...
Autora: Marianne Curley.
(Con descarga)

1. LOS ELEGIDOS.
Ethan es un niño de doce años que va a la escuela como todos los niños de su edad, pero tiene como una vida secreta. El es un guardián del tiempo que su misión consiste en proteger el pasado para que el presente no cambie, por los beneficios del mal que es una orden llamada caos. Cuando le asignan una aprendiz de su misma clase que se llama Isabel, las personas que ellos conocen hacen que tengan nuevos papeles, unos buenos y uno malos. Aparece un personaje extraño llamado Marduke que busca venganza, y quiere matar al padre de Ethan y al final se enzarzan en una batalla terrible, quien ganara la batalla, eso lo tendréis que descubrir.


2. LA OSCURIDAD.
Se acercan días difíciles para los Guardianes del Tiempo. Doce meses después de la muerte de su amado Marduke, la Diosa del Caos ejecuta su terrible plan de venganza, lo que obliga a Isabel y Ethan a contraatacar para preservar el curso de la Historia. Junto con Matt, los dos jóvenes se embarcarán en la aventura más oscura, peligrosa y trepidante que habrían podido imaginar, un viaje que los conducirá a través de increíbles paisajes llenos de magia y misterio.



3. LA LLAVE.
Cuando por fin los nueve nombres de la Profecía han sido revelados, la Orden del Caos lanza una devastadora ofensiva contra los Elegidos. La malvada Lathenia desea el poder absoluto, y nuestros héroes sólo tienen una salida: viajar al siniestro inframundo en busca de la llave perdida que abre el cofre de las armas con que derrotar al ejército de Marduke. Y aunque la sospecha de que entre ellos hay un traidor debilita al grupo en los momentos decisivos, los Elegidos emprenden con valor la batalla final contra las terribles e implacables fuerzas del mal, cuyo verdadero poder nadie conoce...

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